Iván Duque

Presidente de la República de Colombia

Ariel Palacios Calderón

Gobernador del Departamento del Chocó

Luis Enrique Mena Rentería

Alcaldía Riosucio – Chocó

En el departamento del Chocó, región del Bajo Atrato, se vulneran constantemente por parte del Estado los derechos fundamentales como la vivienda, salud, educación y la propia vida, tal como pudo comprobó la Caravana Humanitaria del 2019, en la que participó una delegación valenciana, compuesta por 7 personas.

Según el último Censo Nacional de Población y Vivienda -CNVP 2018- este departamento ocupó el tercer puesto por tener un 65.4% de su población con necesidades básicas insatisfechas. En el municipio de Riosucio el 88,81% de sus viviendas tiene deficiencias estructurales, mientras que la tasa de pobreza multidimensional es una de las más altas del país, con un 71%, según datos del Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE, 2018).

Estos indicadores demuestran el alcance del histórico abandono estatal del Chocó, y establecen la causa de la crisis humanitaria que viven las comunidades del Pacífico Colombiano. El conflicto armado se suma a estas condiciones de vulneración a los derechos humanos y actualmente el accionar de los diferentes grupos armados que hacen presencia en el territorio generan hechos victimizantes como el desplazamiento forzado, confinamiento, y vulneración a la seguridad y soberanía alimentaria, entre otros.

A esto hay que añadir la dramática situación en la que se encuentra el municipio de Riosucio tras la madrugada del 29 de diciembre en el que un voraz incendio se cobró la vida de una niña de 9 años y su tía, dejando a 485 personas afectadas que perdieron sus viviendas y enseres; entre las personas damnificadas se encuentra el defensor de derechos humanos, Gabriel Marrugo, quien pertenece al Cabildo Mayor Indígena del Bajo Atrato (CAMIZBA) y estuvo acogido en València por el Programa de Protección Integral y de Acogida a Defensores y Defensoras de Derechos Humanos.

No es la primera vez que el municipio es víctima de las llamas, en el año 2010 más de 35 familias perdieron sus casas y en el 2016 se produjo otra conflagración, la administración se comprometió a crear un cuerpo de bomberos y trabajar para mejorar las condiciones de habitabilidad, sin embargo en la noche del 28 de noviembre el municipio tiene que pedir ayuda a los cuerpos de bomberos de los municipios más cercanos, que se encuentran a tres horas de distancia, pero no pueden acudir a socorrerlos porque según las investigaciones adelantadas no contaban con combustible y la ayuda aérea tampoco llega debido a las malas condiciones meteorológicas. El pueblo es el que logra parar la conflagración, evitando que la tragedia fuera aún mayor.

Ante esta situación de emergencia, solicitamos al Estado Colombiano:

 

  • Establecer los mecanismos de articulación del Gobierno Nacional, departamental y municipal para prevenir, mitigar y atender la crisis humanitaria presente en la región, sin escatimar esfuerzos.
  • Reconstrucción inmediata y en condiciones dignas de habitabilidad de las viviendas arrasadas por el fuego.
  • Creación y dotación de un cuerpo de bomberos para el municipio, atendiendo a las consideraciones de la Procuraduría General de la Nación que lanzó una fuerte advertencia en la que indica que el 90% de los municipios del Chocó carecen de un cuerpo de bomberos y ante una nueva emergencia las consecuencias podrían ser mayores a las ocurridas en Riosucio
  • Dotación de infraestructuras para garantizar a la población el acceso a servicios básicos como acueducto, alcantarillado y la garantía de derechos como salud y educación.
  • Mejora de las vías de acceso terrestres y fluviales de la región que permitan a la población comercializar sus productos y romper el aislamiento.
  • Establecimiento de mesas de diálogo y negociación con los grupos armados, como medida determinante para frenar la crisis humanitaria que padece el territorio. El dialogo es indispensable para conseguir un derecho fundamental como es el de la Paz.

Diciembre 21 de 2020, València (España)

Adhesiones:

Isaura Navarro. Secretaria Autonómica de Salud Pública de la Generalitat Valenciana

Pilar Lima. Coordinadora de PODEM País Valenciá (España)

Afavit (Asociación de Familias Víctimas de Trujillo)

Asamblea de Solidaridad con México del País Valencià

Asociación “Talita Cumi”

Asociación Entreiguales València

Asociación Paz con Dignidad

Asolatino (Berna)

Associazione Jambo, commercio equo

Atelier ONGD

CCOO PV

CEAR Catalunya

CEAR PV

CEAR-Euskadi

Centro de Documentación y Solidaridad con América Latina y África (CEDSALA)

CIM Burkina

Colectiva de mujeres refugiadas, exiliadas y migradas

Colectivo Sur Cacarica

Colectivo Unitario de Trabajadores (Aragón)

Comissió Catalana d’Ajuda al Refugiat

Confederación Intersindical

Coordinació Valenciana de Solidaritat amb Colòmbia

Coordinadora de Entidades de Solidaridad con África – CESÁfrica

Coordinadora Obrera Sindical COS

Coordinadora Valenciana de ONGD

Corriente sindical de izquierda

Ecologistes en Acció de València

Ecosol ONGD

Fundació Novessendes

Fundación Mundubat

Intersindical Región Murciana

Intersindical Solidària

Intersindical Valenciana

Jovesolides

LAB sindikatua

Mesa Poética por la Paz

Movice Capítulo Madrid

Nourdine – Asociación Cultural La Paz

Oxfam Colombia

Perifèries

Petjades ONGD

Programa Valenciano de Protección Integral y Acogida a Defensoras y Defensores de Derechos Humanos

Plataforma Extremeña de Solidaridad con Colombia

Psicólogas y Psicólogos sin Fronteras

Pueblo y Dignidad

Red Flamenca de Paz (Bélgica)

Reds – Red de solidaridad para la transformación social (Barcelona)

Sinficat Unitario y Autónomo de Trabajadores de la Enseñanza de Asturias (SUATEA)EA

SOEPIC

SOLdePaz.Pachakuti

Unió de Llauradors i Ramaders

XXI Solidario